Carlos Montero.
El mercado de acciones americano ha marcado su sexta semana consecutiva de caídas y todas las miradas ya ponen la vista en la media de 200 sesiones como principal soporte que frene este selloff. Los principales índices europeos ya se encuentran por debajo de la media de 200 sesiones. Ante la gran cantidad de análisis que ponen a esta media como referencia, Mark Hulbert – editor de Hulbert Financial Digest y asiduo colaborador en prestigiosos medios como Barron’s y el New York Times – se hace una pregunta: ¿deberíamos vender acciones si se pierde la media de 200 sesiones?
La respuesta, como a menudo suele suceder en estos casos, no es tan sencilla como nos gustaría. Los sistemas de mercado basados en la media móvil de 200 días, a pesar de que tienen un rendimiento impresionante a largo plazo, han tenido mucho menos éxito en las últimas décadas.
Para conocer su valía en el largo plazo se construye una cartera que replique el Dow Jones cuando el índice se sitúa por encima de su media de 200 sesiones y se venden todas las posiciones cuando el Dow cae por debajo de la media. La conclusión es positiva. La estrategia basada en la media de 200 sesiones obtiene una rentabilidad anual del 6,8% desde finales de 1800, mientras que la estrategia de comprar y mantener obtuvo una rentabilidad anual del 5,1%.
Sin embargo, este sistema es muy decepcionante si lo utilizamos en las últimas dos décadas. Desde principios de 1900 hasta finales de mayo de este año, el sistema basado en la media dio una rentabilidad del 4,2% anualizada frente al 7,2% si hubiéramos comprado y mantenido. Si hubiéramos mantenido nuestro dinero en el mercado monetario (letras, depósitos, etc.) la rentabilidad frente al sistema de medias habría sido muy similar.
Blake LeBaron, profesor de finanzas en la Universidad de Brandeis, que ha analizado extensamente diversas estrategias de análisis técnico, incluyendo medias móviles , dice que existe la clara posibilidad de que algo haya cambiado de forma permanente en los mercados financieros eliminando en a la media móvil como indicador para entrar/salir del mercado.
¿Qué podría ser? El profesor LeBaron especula que uno de los culpables podría ser la creciente popularidad de la media móvil de 200 días. Cuantos más inversores comienzan a seguir un determinado sistema, desde luego que su potencial para batir al mercado comienza a evaporarse.
El resultado final: a menos que tenga buenas razones para creer que las dos últimas décadas fueron una mera excepción y no la una nueva norma, debería pensárselo dos veces antes de comprar o vender acciones en función de si el mercado está por encima o por debajo de su media móvil de 200 sesiones.
Fuente: Mark Hulbert (Hulbert Financial Digest)