que quieren decir los colores en el amor y la amistad? les dejo un buen comentario sobre este tema de los colores.
Amor sincero (blanco), sublime (crema tirando a naranja), maternal (blanco tirando a rosa), reflexivo (color melocotón), delicado (rosa), fantástico (rojo), melancólico (lila), apasionado o prohibido (rojo), franco (amarillo). Si existen diferentes formas de querer, ¿por qué expresarlas todas con la misma rosa?
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El taller de arte floral de Flora Miserachs abre sus puertas por Sant Jordi, en la popular y estrecha calle Avió Plus Ultra, en Sarrià, y expone un total de 3.000 rosas, de 50 clases distintas, dedicadas a cincuenta tipos distintos de amor.
Desde hace veinte años el taller de Flora Miserachs trabaja en la búsqueda del lenguaje floral, tratando de encontrar las flores y las plantas más apropiadas a cada persona, ocasión y sentimiento. «No tenemos una tradición clara de lenguaje floral en nuestro país», explica Flora, la propietaria, ya que «utilizamos las mismas flores para diferentes celebraciones, como un nacimiento, una boda, un cumpleaños o un funeral». «Lo único que varía es la forma de colocarlas», asegura Miserachs. Sin embargo, existe un día al año, hoy, en que todos estamos de acuerdo en que la rosa es símbolo de amor. Ningún día mejor que Sant Jordi, por tanto, para comprender el trabajo de este taller.
Partiendo de su nombre botánico, Flora, de 62 años, asigna el tipo de amor a cada rosa en función del color, la manera que tiene de abrir, la forma del pétalo o el color de las hojas. La elección de los diferentes tipos de amor tampoco es arbitraria, sino que es fruto de su experiencia personal. «Los amores se corresponden mentalmente con alguien de mi vida», afirma.
No todo el mundo que acude a la calle Avió Plus Ultra por Sant Jordi escoge la rosa en función de su significado. Hay quien la escoge simplemente porque le gusta y otros que recorren la calle varias veces hasta que dan con el amor que andaban buscando.
Respecto a si existe alguna rosa favorita para ser la estrella en Sant Jordi, Miserachs afirma que cada año es una «sorpresa» y lo único que se atreve a adelantar es que «el rojo no domina». A ella, lo único que le gustaría «es que cada uno pudiera encontrar lo que busca no sólo en las rosas, sino también en la vida»
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