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En una entrevista con la CNBC, aconseja hoy a los inversores ser su propio banco central y acumular cada vez más reservas de oro en lugar de especular tanto con el metal.
A su juicio, lo que hace del oro una inversión tan atractiva es la política de la Reserva Federal de Estados Unidos de imprimir dinero para mantener el dólar barato en un intento por estimular la recuperación. “El oro está denominado en dólares, así que una caída del billete verde hace que el metal este más barato para comprarlo en los mercados internacionales”, declaró hace unos días el gurú.
En su opinión, una vez la segunda ronda del programa de flexibilización cuantitativa de la Fed (QE2) finalice en junio, el organismo estará bajo presión para anunciar una nueva ronda.
Si bien reconoce que el dólar podría registrar un rally temporal a corto plazo, cree que en un futuro no muy lejano, “el valor del dólar será precisamente su valor intrínseco, es decir, cero, exactamente cero”.
Faber no cree realmente que estemos ante una burbuja del oro. Es más, opina que tal vez el metal está hoy más barato que en 1999, cuando costaba 252 dólares. Según recoge el diario Oro y Finanzas, hace unas semanas, el gurú ya apuntó que al nivel actual de 1.400 por onza el oro está más barato que en el año 1999 si se tiene en cuenta la impresión de dinero en el mundo y el actual nivel de endeudamiento mundial respecto al que había entonces.