D. Esperanza.
Las firmas desaconsejan a los inversores con un perfil de riesgo medio destinar más del 15% de la cartera a valores del sector bancario.
El sector financiero internacional ha ganado alguna batalla de confianza desde el comienzo de la crisis financiera, pero no la guerra. Con el comienzo de 2011, las entidades españolas han dejado de lado el gran castigo bursátil padecido en 2010, ejercicio en el que los bancos del Ibex se dejaron más de un 20%. Este año suben un 6% de media, mientras que el índice sectorial bancario del DJStoxx600 se anota un 3% anual.
Pese a los recientes síntomas de mejora, aún hay varios asuntos encima de la mesa que pueden poner la zancadilla al sectorial en los próximos meses. “Seguimos infravalorando el sector porque hay incertidumbres añadidas a las propias del mercado mayorista de financiación y la sostenibilidad del crecimiento”, afirma Alberto Roldán, de Inverseguros. Las dudas sobre la reestructuración del sector financiero español, el deterioro de las cuentas y el aumento de la morosidad en los próximos trimestres como consecuencia de la subida de tipos de interés en la zona euro, son algunas de ellas.
Oportunidades
David Ardura, de Gesconsult dice que este tipo de inversión es recomendable para un inversor con un horizonte a medio y largo plazo, cualificado y que sepa aguantar la volatilidad que seguirá acompañando a la banca durante los próximos meses. Hay oportunidades atractivas en algunas entidades con buenos fundamentales, que cotizan a precios atractivos y que podrán salir airosas de la crisis económica que seguirá presente.
Inversis cree que en una cartera de renta variable de un inversor conservador se puede destinar a la banca, como mucho, el 15% de la inversión. Para Gesconsult, el peso ideal de la banca en cartera es del 6%.
En España, el principal escollo de la banca es la debilidad económica, que continuará pesando en el balance del sector en los próximos meses. “En una economía donde una de cada cinco personas no trabaja, en la que el 30% de los parados no recibe prestación alguna y donde el consumo es tan débil no presenta ninguna ventaja para un sector tan sensible a estos factores como es el bancario”, afirma Roldán. El pasado lunes se publicó que la tasa de morosidad del crédito concedido por la banca se elevó al 6,06% en febrero, un nivel que no alcanzaba desde septiembre de 1995.
Los analistas no esperan sorpresas muy negativas en los resultados del primer trimestre. Pero en los meses sucesivos, sus cuentas padecerán las consecuencias de la subida de tipos, lo que les pesará en bolsa. En este sentido, las firmas mantienen en cuarentena a la banca mediana. “A ellas especialmente les puede penalizar el aumento del precio del dinero, ya que mientras que necesitarán tiempo para poder ir apreciando sus activos a tipos más altos, van a sufrir un estrechamiento en los diferenciales importantes que lastrará sus resultados”, explica Roldán.
Popular
Popular podría ser una buena opción para un inversor de perfil más agresivo, según David Ardura. Justifica esta apuesta en que la entidad está bien capitalizada, con lo que no tiene que seguir con el proceso de desapalancamiento y puede empezar a registrar una recuperación sostenible en el ROE (rentabilidad sobre fondos propios) a partir del próximo año. Además, cotiza a 0,71 veces valor en libros, una de las ratio más atractivas del sector. “La combinación de todo ello hace que veamos atractivo en la entidad, aunque siempre siendo conscientes de las turbulencias que puede vivir su cotización a corto plazo”, explica el experto.
Unicredit menciona además otro lastre de las entidades españolas: su exposición al sector inmobiliario. La firma considera que la banca española necesita elevar las provisiones para cubrir el riesgo del crédito promotor e hipotecario. “En el caso de los bancos debería duplicarse desde el 12% de media que tienen ahora las entidades y en el de las cajas, tendrían que elevarlo desde el 14% hasta el 35%”, aseguran. Por el lastre que supone el riesgo inmobiliario, Unicredit mantiene su recomendación de infraponderara Popular.
BBVA
Por el contrario, incluye a BBVA entre sus bancos preferidos de Europa. Alega que posee una posición de capital más cómoda y espera que la posición de capital (core capital) alcance el 10% en 2012. Por su parte, Alberto Roldán, de Inverseguros, indica que esperan que BBVA anuncie algún movimiento corporativo de cierta envergadura en el corto plazo, por lo que prefieren ser cautos a la espera de que informe sobre lo que está comprando, dónde y cuánto está pagando.
Santander
Unicredit considera que Santander necesitará 6.000 millones de euros para llegar a alcanzar un core capital del 10%, por lo que prefiere tomar posición en BBVA. Por el contrario, en Inverseguros prefieren a Santander por su valoración y su diversificación geográfica. También Pablo García, de Oddo Securities, recomienda comprar acciones de Santander, a las que otorga un precio objetivo de 10,5 euros. Ayer, los títulos terminaron en 8,24 euros, tras subir un 0,72%.
Tanto Santander como BBVA tienen un potencial alcista superior al 19%, aunque Ardura recuerda que estas apuestas son sólo idóneas para inversores que sepan aguantar las oscilaciones del mercado.
Aseguradoras
En el sectorial asegurador, los analistas ven oportunidades en las dos compañías cotizadas: Mapfre y Catalana Occidente. Ahorro Corporación cree que estas entidades tienen una solvencia por encima de la media de sus competidoras europeas. Sus ratios de capital se situarán, según las exigencias de la Directiva de Solvencia II fijadas en este ejercicio, en un 171,5%, con un exceso de capital de 12.300 millones de euros. Fernando Hernádez, de Inversis, considera que Mapfre es una opción muy sólida porque ha sabido disminuir su dependencia a la economía española gracias al crecimiento de su negocio en Latinoamerica, del que ya depende más del 46% del volumen de primas. La menor tensión en torno a la deuda también ha ayudado al valor a escalar este ejercicio, que sube un 28,83%. Los expertos consideran que podría avanzar otro 10%.
Por su parte, Josep Monsó de GVC Gaesco prefiere Catalana Occidente. La capacidad de fijación de precio en las primas del seguro permite a la aseguradora cuidar sus márgenes, lo que puede ayudar a su cotización. El valor podría subir un 24,28% según Bloomberg.
Ampliando las fronteras, dentro del sector asegurador, la firma alemana Munich Re es el valor preferido de Morgan Stanley en Europa ya que considera que la mejora de su negocio en el último año aún no se ha reflejado en su cotización. Cree que podría subir hasta los 144 euros, un 31% por encima de su nivel actual.
Para Hernández, Allianz es otro de las aseguradoras que puede ser una buena oportunidad porque cotiza un 14% por debajo de su precio objetivo y su negocio en Europa continuará creciendo a un ritmo avanzado.
Por otro lado, el hólding de mercados españoles BME también entra en las quinielas de valores preferidos del sector financiero. Su valoración es atractiva: cotiza a un PER de 6,96 veces frente a las 8 veces a las que cotizan de media sus competidoras. Además, “los posibles movimientos corporativos en el sector y su previsible acercamiento a Deutsche Boerse darán visibilidad a la compañía”, asegura Monsó. BME tiene un potencial alcista del 3,5%.
Fuera de España
El sector financiero de la zona euro esconde pequeñas joyas de inversión, según los expertos. Sus apuestas se centran en cinco entidades: el alemán Deutsche Bank, los franceses BNP Paribas, Crédit Agricole, Dexia y el italiano Unicredit.
De Deutsche Bank, la mayor entidad alemana, Hernández destaca sus esfuerzos por sanear sus balances y la buena marcha de su banca de inversión en toda Europa. Considera que tras la ampliación de capital de 223 millones de euros para su filial española que anunció la semana pasada, el banco podrá sortear la debilitada situación económica del país. Deutsche Bank tiene además la rentabilidad por dividendo más elevada del sector en Europa, del 6,3% y posee un potencial alcista del 22,6%, según los expertos consultados por Bloomberg.
En Francia, los expertos creen que tanto Crédit Agricole, como BNP Paribás pueden sacar provecho a la mejora de la situación económica del país galo. La firma estadounidense Bernstein prevé que estas entidades se beneficien de los débiles costes de financiación y no se vean penalizados por las normas de Basilea III en materia de fondos propios. En cuanto a Dexia, Hernández cree que es uno de los bancos con mayor margen de crecimiento por su capacidad de retorno sobre fondos propios. Las tres entidades podrían subir al menos un 30%, según los analistas.
Por su parte, Italia es de los países que junto a España ha sufrido la preocupación de la deuda, aunque en este mercado también hay alguna opción atractiva de inversión, como Unicredit. “El excesivo castigo padecido por el banco (cede un 15% desde los máximos de febrero) ha dejado al valor a un precio muy atractivo”, asegura Monsó. Los buenos resultados de 2010 presentados el pasado mes de marzo (ganó 1.323 millones de euros) demuestran que sus esfuerzos por mejorar su balance han tenido sus frutos, según el analista. Eso sí, asegura que este valor es recomendable para aquellos inversores que tengan un perfil de riesgo elevado ya que considera que la volatilidad seguirá acompañando a la entidad. Monsó nombra también a Intesa San Paolo como otra oportunidad de inversión atractiva. La ampliación de capital de 5.000 millones de euros que la entidad realizará para mejorar sus ratios le dejarán en una buena situación frente a sus homólogos italianos, según el analista. El banco pretende así alcanzar una ratio de patrimonio básico del 10% en 2015 mediante sus actuales recursos. Los títulos de Intesa San Paolo suben un 7% en 2011, y podrían escalar otro 25% según Bloomberg.