Las red de OAVs del Ministerio de Justicia, repartidas por todo el territorio como un servicio público gratuito desde su instauración en 1995, se abren a partir de ahora enteramente a las familias de personas desaparecidas sin causa aparente. Creadas inicialmente para dar ayuda y asistencia a las víctimas de delitos violentos y contra la libertad sexual, estas oficinas darán cobertura a las personas con un ser querido desaparecido en varios planos: asesoramiento para la presentación de las denuncias, actuación ante los juzgados, atención psicológica, jurídica y apoyo en los casos de desapariciones en el extranjero, incluidos los secuestros parentales de hijos sacados fuera del país. Este servicio está operativo de forma inmediata, según ha podido confirmar la Fundación QSDglobal en una reunión monográfica sobre el tema, como parte del desarrollo del Convenio suscrito con los Ministerios de Justicia, Interior y Asuntos Sociales.
La atención a las familias de personas desaparecidas es una reivindicación que se remonta a finales de los años noventa en que InterSOS la planteó por primera vez. En las décadas posteriores cada familia que ha sufrido la desaparición de un ser querido ha seguido enfrentándose al mismo vacío asistencial, con la excepción de la oficina creada en 2014 en Cataluña dependiente de los Mossos d’Esquadra.
En noviembre de 2015, el primer Foro de familias de personas desaparecidas, impulsado por QSDglobal y celebrado en Ubeda-Baeza, adoptó una Carta de Derechos y Demandas Urgentes. Dicha Carta fue respaldada unánimemente por todos los participantes; en su introducción, la familias denunciaban “haberse sentido desatendidas, humilladas, perplejas, solas, desprotegidas, decepcionadas, maltratadas, y, en ocasiones, víctimas al enfrentarse al trance de denunciar la desaparición de un ser querido ante las instancias oficiales”. Entre las demandas planteadas como urgentes se mencionaba expresamente la “creación de oficinas de atención y apoyo profesional a las familias de personas desaparecidas. Oficinas donde las familias sean tratadas de acuerdo a sus derechos como ciudadanos, en todo lo referente a asistencia psicológica, técnica, económica, legal e internacional”.
El importante logro que supone poder contar en lo sucesivo con las Oficinas de Atención a las Víctimas es deudor de la lucha tenaz de colectivos y Asociaciones de familiares que, como InterSOS desde 1998 y SOSDESAPARECIDOS desde 2010, han venido reclamando de la Administración la asistencia a las familias a través de Oficinas especializadas.