MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) – El Estado registró en el primer trimestre un déficit de 6.900 millones de euros, en términos de Contabilidad Nacional, el 0,64% del PIB, lo que supone un descenso del 20% en comparación con la cifra del mismo periodo del año anterior (8.672 millones), según los datos ofrecidos hoy por el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.
Este resultado fue consecuencia de unos pagos que se situaron en 34.745 millones de euros, un 14,1% menos, mientras que los ingresos sumaron 27.845 millones de euros, lo que supone una caída del 12,4 %.
Ocaña ha asegurado que la evolución del saldo del Estado en el primer trimestre se corresponde con la contemplada en las previsiones del Ejecutivo, por lo que ha afirmado que el Gobierno está cumpliendo los objetivos de reducción del déficit marcados.
“Es una buena noticia”, ha indicado, tras mostrarse convencido de que el Gobierno reducirá el déficit público al 6% este año tal y como ha prometido a Bruselas y a pesar de que otros organismos, como el Banco de España, den cifras ligeramente diferentes (6,2%), que suponen sólo “cantidades manejables” a la hora de evitar desviaciones.
Para cumplir el objetivo, el secretario de Estado ha resaltado la necesidad de cumplir con las reformas puestas en marcha sin necesidad de implementar otras nuevas. De hecho, ha descartado la posibilidad de subir impuestos porque los ajustes por la vía de los ingresos ya se han hecho y ahora toca ajustar los gastos.
Según Ocaña, el déficit del Estado hasta marzo aún no es muy significativo para analizar la evolución del año y hay que tener en cuenta la plena aplicación en 2011 del nuevo sistema de financiación de las comunidades autónomas de régimen común, que supone ciertos cambios en la ejecución.
En concreto, supondrá un descenso en los pagos por transferencias a las comunidades y un aumento de los ingresos cedidos por la aplicación de los nuevos porcentajes de cálculos.
LOS INGRESOS NO FINANCIEROS SUBEN UN 45.906 MILLONES
Los ingresos no financieros ascendieron a 45.906 millones en el primer trimestre, un 2,7% más que en 2010. Los ingresos obtenidos sólo de impuestos subieron también un 2,7%, hasta 41.857 millones a pesar del mayor ritmo de las devoluciones, especialmente en IVA.
La recaudación por impuestos directos se elevó a 20.820 millones, mientras que los impuestos indirectos sumaron 21.037 millones en el primer trimestre, un 5,4% más que en el mismo periodo del año anterior. El resto de los ingresos no financieros del Estado aportaron 4.049 millones.
Por figuras impositivas, el IRPF proporcionó 19.672 millones, un 2,4% más gracias al incremento del 3,5% de los ingresos de las retenciones del trabajo. El Impuesto de Sociedades, por su parte, recaudó 397 millones hasta marzo, aunque su comportamiento es irrelevante a la espera del resultado del primer pago fraccionado que se hará en abril.
SUBE EL IVA
Dentro de los impuestos indirectos, la recaudación por IVA ascendió a 15.748 millones, un 8% más que en el primer trimestre de 2010 debido, en parte, al efecto acelerador sobre la recaudación de la subida de tipos del pasado mes de julio, y al incremento de las devoluciones.
La recaudación por Impuestos Especiales suavizó en marzo el perfil negativo mostrado en el arranque del año, al pasar de un retroceso del 4,4% a un descenso del 2,8% en la recaudación acumulada.
El mejor comportamiento se reflejó en todos los impuestos, aunque los más importantes desde el punto de vista recaudatorio son el de las Labores del Tabaco y el de Hidrocarburos, que mantienen una evolución negativa respecto a 2010.
SE MODERA LA CAÍDA DE LABORES DEL TABACO
En concreto, la recaudación del Impuesto por las Labores del Tabaco ha caído un 5,5% en el primer trimestre, por lo que se ha amortiguado la caída desde el mes de enero (30%). De hecho, Ocaña ha dicho que hay que esperar unos meses para ver la evolución y se ha mostrado convencido de que la caída de la recaudación en su efecto neto no será como el 30% de enero.
Los pagos financieros, por su parte, representaron 36.613 millones hasta marzo, lo que supone un ajuste del 24,2% en comparación con 2010. Una parte significativa de esta reducción del gasto se explica por el descenso del 30,3% registrado en el capítulo de transferencias corrientes, que representa el 50,1% del total.
El resto de capítulos presentan también descensos importantes, con la excepción de los gastos de personal, que crecen un 0,8% aún influido por el pago a las clases pasivas de las compensaciones por la desviación del IPC en el ejercicio anterior. La rúbrica de sueldos y salarios del personal activo, por el contrario, cayó un 5,1%.