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Dónde comprar los fondos que le recomiendan y nunca encuentra

Ana Palomares.

Quizá sea uno de esos miles de inversores que ha acudido alguna vez a su banco para contratar algún fondo de inversión. Lo normal es que su entidad siempre le haya recomendado uno de los suyos, que para eso tiene una gestora, que se dedica a ello. Pero eso no implica, al menos no en todos los casos, que el fondo que adquiera dejándose llevar por lo que le dicen en su banco sea el mejor producto que pueda comprar -de hecho, sólo uno de los mejores fondos a cinco años, teniendo en cuenta las categorías más comunes, es de una gestora nacional.

Es como si uno compra los yogures marca blanca de una firma de distribución pero sabiendo que los que le van a sentar mejor son los de marca que no se venden en ese establecimiento.

Si es usted uno de esos inversores quizá no sepa que como inversor español tiene acceso a más de 15.000 fondos de inversión (se incluyen las diferentes categorías que tienen cada uno). Todos se venden en España y encontrarlos no es tan difícil como buscar una aguja en un pajar. Basta con acudir al lugar adecuado. ¿Iría a un chino para comprar caviar o a uno de esos supermercados de grandes dimensiones?

Pues los fondos también tienen sus propios supermercados. Plataformas que, a diferencia de los bancos, no tienen gestora propia y cuya función es actuar de intermediario entre el cliente y la gestora a la que rara vez tendría acceso de otra forma. “Hay entidades financieras con gestora propia que restringen el acceso a fondos internacionales o que simplemente no ofrecen este servicio a sus clientes”, confirma Carlos Fernández, responsable de análisis de fondos de Inversis Banco.

Esta plataforma es una de las opciones que tiene el inversor para acceder a un amplio universo de fondos y no sólo a los de la gestora de su banco de referencia. En concreto, y según explican desde Inversis, ofrecen a los inversores acceso a más de 4.500 fondos de inversión, tanto de gestoras nacionales como internacionales, como a más de 1.000 ETF, coticen o no en el mercado español. Eso sí, para tener acceso a esta oferta es necesario que el cliente se abra una cuenta con la entidad.

“Todos los clientes tienen una cuenta de efectivo y una cuenta de valores en la que depositarán sus inversiones. La cuenta de valores no tiene ningún coste de mantenimiento y la de efectivo tiene una comisión de un euro al mes”, afirman desde Inversis.

El mismo requerimiento, el de tener una cuenta, es también el que requieren otras plataformas de fondos, comúnmente denominadas supermercados de fondos. “Hacerse cliente de Tressis no tiene ningún coste de mantenimiento pero sí tendrá un gasto por intermediación o transacción, en función de los servicios que se contraten”, afirma Santiago Rivera, director general.

Entre estos servicios se encuentran la construcción de carteras modelo de fondos, el asesoramiento, la gestión discrecional. En todo caso, esta plataforma ofrece acceso a un universo de 7.500 fondos. No obstante, invertir en un fondo a través de una de estas plataformas no exime al inversor de cumplir los requisitos propios que tiene cada gestora en cuanto a la cantidad mínima de inversión que requiere cada fondo (puede ser de 1 euro a 1 millón de euros) o los costes que soporta cada uno de sus productos (comisiones de suscripción, reembolso, gestión y depositaría).

Además de las comisiones que deberá pagar si opta porque la plataforma de fondos no sólo le sirva de vehículo de intermediación, sino también de asesoramiento. Por ejemplo, Renta 4 ofrece a sus clientes la posibilidad de contratar una cartera de fondos de entre cerca de 5.000, que selecciona los productos que puedan resultar más adecuados para cada perfil de inversor. “El coste de gestión es un 10 por ciento anual sobre el beneficio semestral de la cartera de fondos o del 0,5 por ciento anual sobre el patrimonio gestionado semestralmente”, aseguran desde Renta 4.

¿Imposible comprarlos en el banco?

La respuesta es no. Si bien es cierto que es complicado que un inversor, sobre todo si éste no es cliente de banca privada, contrate un fondo de una gestora que no sea la de su banco en su oficina bancaria, no es del todo imposible. Sobre todo teniendo en cuenta que cada vez son más las gestoras ligadas a bancos que optan por lo que se conoce como arquitectura abierta. Esto es, vender fondos de gestoras externas a la suya, sobre todo de aquellas categorías en las que la entidad no dispone de recursos de gestión.

Por ejemplo, según los últimos datos de la CNMV, Grupo Santander es el mayor distribuidor de Instituciones de Inversión Colectiva extranjera en el mercado español, con un total del 27 por ciento de fondos vendidos.

“Hace unos años esto era muy complicado, ya que un banco solía comercializar en exclusiva los fondos de su entidad pero cada vez es más frecuente ver en los grandes grupos bancarios españoles una tendencia hacia la arquitectura abierta”, afirma Victoria Torre, de Self Bank, a través de cuya plataforma el inversor tiene acceso a 1.500 fondos de inversión de más de 35 gestoras.

Ellos ofrecen además de la posibilidad de contratar fondos, herramientas que permiten a los clientes ayudar a saber qué producto le conviene más. “El público minorista muchas veces encontrará más facilidades para el consejo o asesoramiento que en su entidad bancaria, donde determinados servicios están reservados a clientes de banca privada”, afirma.

Además, lo previsible es que cada vez sean más las gestoras bancarias que recurren a la arquitectura abierta para vender fondos de inversión. Sobre todo teniendo en cuenta que la reestructuración que están llevando a cabo las cajas españolas llevará a muchas de ellas a desprenderse de su negocio de gestión de activos.

Uno de cada cuatro euros en fondos de inversión españoles están ahora en manos de gestoras ligadas a cajas de ahorros en proceso de fusión. Y de un total de 40 cajas, 17 cuentan con gestora propia, de la que podrían desprenderse ya que externalizando su negocio conseguirían ahorrar costes y aún así seguir recibiendo ingresos, aunque sólo por la distribución.

Ideas de inversión

A la vista de los resultados, lo cierto es que a lo largo de los últimos años, son pocos los fondos de gestoras ligadas a entidades financieras españolas que han conseguido convertirse en el mejor producto de su categoría.Por ejemplo, dentro de renta variable destaca el fondo BGF Swiss &Small Mid Caps, gestionado por BlackRock que en el último lustro ha conseguido ganancias anualizadas del 14,17 por ciento.

Dentro de la categoría de bolsa emergente, también es un producto gestionado por una firma extranjera, Fidelity, el que consigue el primer puesto del ranking de rentabilidad. En este caso es el aún desconocido mercado indonesio el que permite que FF Indonesia se convierta en el producto más rentable de los últimos cinco años, según los datos de Morningstar, con la nada despreciable rentabilidad anualizada del 24,51 por ciento.

En renta fija, sucede lo mismo. Pese a que es una de las especialidades de las firmas extranjeras, tanto el mejor fondo mixto como de renta fija están en manos extranjeras (ver cuadro). Pero como siempre hay excepciones, sí hay un producto de gestora bancaria española que se coloca a la cabeza del ranking, en este caso de los mejores fondos alternativos. Se trata de BK Quant, de Bankinter, con 7,30 por ciento anual en el último lustro.

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