El grupo francés de ocio y telecomunicaciones Vivendi obtuvo un beneficio neto atribuido de 241 millones de euros en el tercer trimestre del año, lo que supone un retroceso del 35,2% respecto al mismo periodo de 2010, informó la compañía gala, que atribuyó buena parte de este resultado al impacto negativo de la nueva normativa fiscal en Francia.