El Ibex 35 no consiguió salvarse de las pérdidas, a pesar del optimismo con que arrancó el mercado la primera sesión de la semana arrastrado por el efecto positivo de Grecia, y se alejó de la barrera de los 8.800 puntos.
El Ibex 35 no consiguió salvarse de las pérdidas, a pesar del optimismo con que arrancó el mercado la primera sesión de la semana arrastrado por el efecto positivo de Grecia, y se alejó de la barrera de los 8.800 puntos.