El grupo alimentario suizo Nestlé obtuvo en 2011 un beneficio neto atribuido de 9.487 millones de francos suizos (7.840 millones de euros), lo que supone una caída del 72,3% respecto al ejercicio anterior, cuando las cuentas de la compañía se beneficiaron de la venta de su filial Alcon a Novartis.