Cualquier persona con un patrimonio grande debería reflexionar sobre la protección offshore de sus activos, una estrategia será de especial interés en aquellos sectores donde hay un alto riesgo de litigios, como por ejemplo en el área de la salud, legal, empresarial e inversión. Desde Foster Swiss, asesoría fiscal y financiera, están especializados en la protección del patrimonio y wealth management.
Las estrategias de protección de activos hacen que los activos de una persona no estén fácilmente disponibles o recuperables en caso de un procedimiento judicial contra ellos. Ésta puede tomar varias formas, y si bien hay muchas alternativas, los recursos offshore suelen ser más efectivos y beneficiosos para este fin.
La confianza es el eje principal de la protección de activos offshore, por lo que las sociedades offshore y los fideicomisos offshore son una parte integral de una correcta estrategia de protección de activos. Las sociedades y fideicomisos offshore pueden utilizarse por separado o en conjunto para la protección de activos y por lo general, acompañadas de la cuenta bancaria offshore.
Estrategia de fideicomiso para la protección de activos
En un fideicomiso, el fideicomitente (quien transfiere activos al fideicomiso), da legalmente el control de sus bienes a un fideicomisario, que gestiona y controla éstos en favor de un beneficiario (que puede ser el mismo fideicomitente).
Los recientes desarrollos legislativos en determinadas jurisdicciones offshore han mejorado significativamente la confianza en el derecho común original, ofreciendo defensas eficaces contra las disposiciones de herencia forzosa e imponiendo límites de tiempo a los reclamos de acreedores.
Con el fin de garantizar una protección más eficaz de los activos offshore, es necesario establecer la empresa en una jurisdicción con una sólida legislación de privacidad de empresas internacionales, con fuertes leyes de secreto bancario, y moderna normativa en materia de fideicomisos. La isla caribeña de Nevis es una de las opciones para implementar una estrategia de protección de activos.
Debe tener en cuenta, que una estrategia de protección activos no se puede poner en marcha cuando hay acciones legales inminentes o están en curso, ya que cualquier intento de transferir los activos bajo esta circunstancia puede ser considerado un delito.